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domingo, 19 de mayo de 2013

DIAS DE CALOR…


Mientras que el país marcha-no sabemos hacía donde pero de que marcha, marcha-, los maestros colapsan la solemnidad de su día pidiendo clemencia, incremento salarial, una beca en España como a Moreira, un no a la privatización a la educación además de un no rotundo a la evaluación- faltaba mas, pos estos- mientras que el América seguido por sus mas fervientes creyentes vuela de nuevo a su enésimo renacer, ocurre que el calor agobia y como dijo el sabio Chavirita “El pueblo unido jamas será vencido” abre sus brazos a su fiesta religiosa mas importante en donde todos somos iguales, y hasta el gran Baudelio- ¡AVE CESAR!- pollo de todos los moles, anda metido a repicador de campanas, cargador de garrafones, y puntal de procesiones como nunca antes se ha visto ni se verá.

Y mientras que Saturnino-Niño de bien- Martínez., aprieta focos y tuercas para que no falle el alumbrado principal que iluminara la fiesta, y dará luz al entendimiento hasta para el mismísimo Felipe Rúa, mientras todo eso pasa Antonio Vázquez, nuestro Chichihui piel canela…autentico galardón viviente de este pueblo de la fiesta eterna, estrena cargo y carga haciendo la talacha como nuevo director de la Comisión Estatal Indígena, esto nada más para que todos aquellos que dudaban que existe la resurrección política, que no la reencarnación como creen algunos, ahí esta nuestro Chichihui con las tablas de la ley en una mano y su nombramiento en otra, anunciando las buenas nuevas y el regreso del temporal presupuestal para su comunidad indígena luego de años de sequia, y será cosa de preguntarle a Felipe Rúa, el Harry Potter de la política autóctona que en lugar de zurcidos invisibles le hizo unos remiendos rústicos a las finanzas publicas que no espantan ni al mas pintado. El calor nos hara libres anuncia desde la barra del Cinco Bigotes el gran Jimmy, quien anuncia que solo las caguama serán el salvoconducto para estar en el lugar indicado, y la hora precisa para renacer, resucitar, pero nunca reencarnar y menos en el lado equivocado.

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